viernes, 18 de septiembre de 2020

Biografía y anécdotas del Maestro Murillo por Hernán Rodríguez Castro

 

Emilio Murillo

(Foto de Álvaro Pulido EL ESPACIO)


El maestro Emilio Murillo Morales conocido como el Mono Murillo por muchos, nació en una trilladora situada en Tarro Liso, una calle del Fresno Tolima, el mes de Junio del año 1908. No se sabe qué día porque a raíz de un gran incendio que hubo en el casco urbano, la casa cural fue devorada por las llamas, y en consecuencia los archivos desaparecieron. Sus padres se llamaron Pablo Emilio Murillo y Francisca Morales.

 

Sus estudios primarios incompletos los hizo en la escuela nocturna de su pueblo natal, pues por el escaso presupuesto del que disponía la familia Murillo, tenía que trabajar para ayudar al sostenimiento del hogar donde había dos hermanos más: uno de ellos que murió pequeño y el otro Marco Tulio Murillo Morales falleció en Mariquita, donde también ocurrió el deceso de su señora madre. Los hermanos Murillo trabajaron como obreros de su padre  y por tanto aprendieron y ejercieron labores de zapatería, ya que el señor Murillo tuvo una pequeña fábrica de calzado. Hacía las hormas, solaba, guarnecía y se ganó un concurso dentro de esta actividad.

 

A los quince años aprendió a tocar flautín y flauta; precisamente el primer flautín lo pagó el padre Cortés, quien solicitó que consiguieran uno para Emilio Murillo que él lo pagaba. Era ahijado del Maestro Milciades Garavito quien dirigía a la sazón la banda del Fresno, y fue con quien aprendió a leer y escribir música a los diez y ocho años. Tocaba con la banda ya mencionada y con la familia Garavito en diversos actos, como en la introducción y proyección del cine mudo en Mariquita, hacía también los solos con la flauta en la presentación de música clásica en el Fresno con la banda.

 

Vivió en el Líbano durante un tiempo y allí compuso y escribió una marcha que llamó Dabeiba, la que perdió junto con otras obras que había  escrito, y algunas que le dejó el Maestro Garavito como Urra Cachacos, a causa de una de las  inundaciones más fuertes que ha tenido Honda.

 

Entre sus recuerdos tristes está Rosita una compañera que de pronto se le dio por viajar unos días, y al llegar a Puerto Nare murió. A causa de esto lo invadió la melancolía e hizo una composición que llamó  Rosita y la perdió;  pero últimamente por un amor platónico escribió otra pieza musical que llamó también Rosita.

 

A raíz de la tristeza ocasionada por la separación y muerte de su excompañera, viajó con mucha frecuencia a Mariquita y en 1940 se trajo a su señor padre, estableciéndose definitivamente en Honda; vivó durante cinco años en el Pasaje Pinilla en la Ratonera, después se trasladó a la esquina del Cuartel de la Ceiba una edificación que se había hecho en bloque. En esta casa antes de vivir el Maestro Murillo, vivía Polito Escobar quien tenía una cantina en la misma cuadra o calle de su residencia y en ella tocaba Emilio Murillo con un grupo llamado JAZZ; al irse el señor Escobar le regaló o dejó dicha construcción que demolieron, porque a los vehículos sobre todo los pesados (camiones) les costaba trabajo voltear en esa esquina. La demolición se hizo durante la alcaldía de  don Manuel Cerón pero don Arturo Cerón padre del entonces señor Alcalde, conocía a don Pablo Emilio Murillo y a su hijo Emilio Murillo por lo que ante el ruego del hijo (Emilio Murillo Morales)  le dieron para vivir el local que actualmente ocupa (La Casa del Sello Real).

 

En las Iglesias interpretaba entre otras obras un vals del maestro Milciades Garavito llamado Fernando; acompañaba con la flauta a un pianista en la Iglesia del Carmen, y también a veces era acompañado de un señor Villamizar que tocaba muy bien el violín por nota. El señor Villamizar vivió en los hangares del aeropuerto e hipódromo de Honda, puesto que era celador del mismo. También tocó con Castelar Gutiérrez hijo de un señor llamado Victorino.

 

Fue profesor de música del Instituto Nacional General Santander en 1951 y 1952; pero había mucha intriga política entre el profesorado. Integró una de las mejores  bandas del Tolima que era la del barrio el   Carmen de Honda llamada Dos de Abril, fundada y dirigida por Onofre Bonilla (el Negro Onofre) músico y compositor nacido y criado en Honda. Varios de los integrantes de esta banda pasaron a tocar en la Departamental y hoy se encuentran pensionados; el maestro Murillo fue también uno de los llamados pero por su amor a Honda resolvió no aceptar y pasar hoy necesidades como el mismo lo dice. Estuvo también en Bogotá dos meses como profesor de un conjunto y dando serenatas, y a pesar del buen dinero que ganó  se regresó a Honda; se considera tan hondano que escribe y afirma “Emilio Murillo Morales fresnuno de Honda”. 

.

Anécdotas

El padre del maestro Emilio  Murillo aparte de ejercer el oficio de elaboración de calzado, también fue músico y tocaba en la banda del Fresno que como ya se dijo dirigía el Maestro  Milciades Garavito,  cuyos miembros eran todos liberales,  pero eran obligados por el General Pompilio Gutiérrez (conservador) a tocar en sus combates como también lo hacían otros tantos generales. Debido a que los músicos firmaban un contrato con el director de la banda, no podían retirarse cuando quisieran y por esto se mantuvo la banda completa. Al terminar la guerra de los mil días el Maestro Milciades Garavito entregó a cada quien los contratos,  disolvió la banda y se escapó.

Pero el señor Pablo Murillo padre del Mono Murillo   y los Cuartas, fueron puestos presos por los hombres del General Pompilio  quienes los ataron muy bien con unas manilas y los llevaron junto con otros más a un sitio llamado Iguacitos para ser asesinados. Cuando ya estaban matando uno por uno  con peinillas y se aproximaban a los músicos el señor Joaquín Londoño; que sabía la oración del Justo Juez; le dijo al señor Murillo que no temiera, pues había rezado la oración y entonces se soltaron fácilmente y se escondieron de inmediato entre los matorrales y el monte, mientras escuchaban las balas que les disparaban y fueron a salir a Lérida.

El Maestro Milciades Garavito compuso y escribió una obra musical dedicada a Honda que llamó Urra Cachacos; la razón de esto fue porque cuando el general Pompilio Gutiérrez después de sitiar a Ibagué y Mariquita, se dirigió con el mismo fin a Honda; Ramón Elías Marín (el Negro Marín) que vivía en  el Fresno y quería a Honda, se encaminó enseguida a esta ciudad con doscientos hombres que al llegar recibió el apoyo de los jóvenes hondanos de entonces, y salvaron la ciudad de las manos del general Pompilio.

Recopilado por Hernán Rodríguez Castro

Honda, Mayo 4 de 1990

No hay comentarios:

Publicar un comentario