jueves, 25 de febrero de 2021

Crónica y memoria por Yeison Ricardo Cardozo Calle


 Están paradas esperando a las manos que decidan hacer andar. La neblina las rodea y las oxida, y ya piensan en petrificar. Las industrias, muevan las industrias”. Así inicia la canción ‘Muevan las industrias’, del grupo chileno Los Prisioneros, lanzada en 1986.

Y así están las instalaciones de esta vieja fábrica de Bavaria en Honda, en el Tolima; edificación que fue cerrada y abandonada en los años noventa, y que junto con otra serie de eventos catastróficos (de carácter económico) cambiaron para “mal” el panorama de la Ciudad de los Puentes (rompimiento del pacto cafetero, crisis financiera, debacle de la subienda por el río Magdalena, la caída del comercio, la banca, entre otros). Hechos que tienen a este, mi pueblo natal, sumergido en la peor fase del ciclo económico. ¿Las consecuencias? Los hondanos las han padecido con creces, por lo menos, en los últimos 20 años.
Yo estudié mi primaria en la escuela Juan Manuel Rudas, a ella llegábamos después de atravesar caminando la popular “Avenida de los estudiantes” en compañía de decenas de amigos de Panchigüa, nuestro popular barrio a orillas del Magdalena, famoso entre otras cosas, por el otrora espectácular fenómeno natural de la subienda. La escuela aún está ubicada diagonal a estas viejas instalaciones donde se producían gaseosas y cervezas que la mayoría hemos consumido. Algunos, de niños, salíamos a ver el proceso de embotellado por los grandes ventanales que daban hacia la calle, la vía siempre estaba repleta de grandes camiones, al lado, habían varias cafeterías, billares que siempre estaban llenos, era común el fuerte ruido que causaba ese proceso de producción mientras estábamos en clases; como en la canción… “Yo me acuerdo que los fierros que ocupaban y chocaban en el patio de la escuela, con cada ritmo que marcaban dirigían el latido de nuestro propio corazón”.
Una veintena de años después, en medio de los Carnavales de la Subienda (y en pleno año electoral), quise detenerme a tomar una foto mientras suena la canción como banda sonora de este corto escrito, una fotografía melancólica y lúgubre, como la abandonada y deteriorada calle que hoy surca la escuela y la antigua fábrica. Pero sobretodo, queriendo rememorar esas épocas, sabiendo y deseando que en Honda… “Los obreros no se fueron se escondieron, merodean por nuestra ciudad. Las industrias, muevan las industrias”.
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Tomado del Facebook de,

3 comentarios:

  1. Muy buena columna te felicito jeison

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  2. La fábrica la cerraron en el 2000

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  3. Que bueno es recordar en esta columna no solo está su historia si no la de muchos Hondanos, así la ciento yo... Me introduje en la columna como en un cuento y por unos minutos me sentí en mi querido y amado PUEBLO.

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